Al realizar el tratamiento con I¹³¹ su gato recibe una pequeña cantidad de radiación, que tendrá que ir eliminando principalmente en la orina y en las heces.

A pesar de ser un tratamiento de medicina nuclear (con isótopos radiactivos) debemos de tener en cuenta que:

• La dosis de radiactividad administrada a su mascota es muy baja. De hecho, los pacientes humanos pueden recibir hasta 15 veces la dosis media que administramos a los gatos y, aún así, irse a casa el mismo día en que reciben tratamiento.
• Además, el día del alta su gato ya habrá eliminado la mayor parte de yodo radiactivo a través de las heces y la orina durante el tiempo que estuvo hospitalizado en IODOCAT.

Por lo tanto, aunque en el momento del alta su gato seguirá siendo mínimamente radiactivo, hay que tomar una serie de medidas de seguridad durante las dos semanas después del alta, para reducir al mínimo el riesgo de contaminación para usted, su familia o sus otras mascotas.

Al aceptar el alta de su mascota, usted se hace responsable de proteger de la radiación a todas las personas que pudieran entrar en contacto con su gato